sábado, 3 de marzo de 2012

Laura, eres tonta, tonta, tonta

Eso fue lo primero que me dediqué mientras me colocaba los auriculares y dejaba atrás a un grupo de personas.

Me gustaba (y sí, hablo en pasado) un chico de mi instituto desde el comienzo de las clases. Solitario, serio y de mirada nada envidiable a la de Medusa. Coincidía con él en el autobús y entre nosotros no hubo más que intercambios de miradas. A medida que transcurría el tiempo mi interés hacia él aumentaba, de la misma forma que lo hacía mi incertidumbre. No sabía si acercarme o cómo hacerlo, mi inseguridad me atenazaba, a veces siquiera me dejaba respirar. Así que dejé que pasasen los meses esperando que diese él el primer paso (no por puro convencionalismo, de verdad) y un día, de improviso, una amiga me susurraba al oído: Quiero tirarme a X. Fingí alegría y la animé a que lo hiciera, entre risas, creyendo que no lograría nada.
Hoy me he quedado boquiabierta al observar el despliegue de "armas de seducción" del que disponía y del desparpajo innato que tiene para esas situaciones. Después de gritar alguna tontería, vanagloriarse sobre el speed que guarda en su casa y enorgullecerse de suspender exámenes, captó la total atención del chico y... Me levanté, fingí un fortísimo dolor de cabeza y me marché de allí.

Soy tonta. La próxima vez intentaré prendarme de una persona menos simplona.


Y ahora, me pondré a bailar con mi amigo el cocainómano Frank Sinatra.

¡Tumlr! :D www.carlthevelociraptor.tumblr.com/

2 comentarios:

Kurai dijo...

=(

Belsan dijo...

Sí, tienes razón, el chico no valía la pena, si cosas tan vulgares llamaron su atención. Ahora, espero que la próxima vez no dejes que una tontázara semejante te robe la oportunidad, como si fuera mejor que tú o algo. ¡Rawr!